A ver. Aunque la verdadera encuesta de afectos a una u otra candidatura es la que se realizará el 20 de mayo próximo, no menos cierto es, que los resultados publicados de algunas de ellas han hecho cambiar, variar y dejar de lado, propuestas, temas y hasta slogans de campaña de nuestros candidatos.
Tal es el caso del Lic. Danilo Medina quien, ajustándose a sus mediciones, ha cambiado su línea grafica y lanza un nuevo concepto para venderse mejor en el electorado que exige “el mejor cambio” en las políticas gubernamentales. Algunos de sus seguidores justifican esta acción diciendo que eso estaba previsto y que es normal que se diseñen varios conceptos de campaña para mantener –sobre todo en nuestra larga y tediosa campaña electoral- una imagen fresca, remozada y atrayente. Podríamos aceptar esto como bueno y válido pero sabemos que si las encuestas dieran a Medina con un 70% de intención de voto, entonces no habría “cambio seguro”.
En el caso del Ing. Hipólito Mejía, sus asesores de campaña –hay algunos extranjeros que se han ido del país- comenzaron como la tromba montados en la ola de “llego papá” y en el sentimiento de insatisfacción de una gran parte de la población dominicana con el gobierno, que incluía a peledeistas disgustados, miguelistas que apoyaban a Hipólito y leonelistas que no querían a Danilo. Esto les dio una gavela y los mantuvo arriba en las encuestas sin haber hecho absolutamente nada para ganarse ese sitial.
En la actualidad la situación esta muy pareja, tanto así que Danilo relanza su campaña visual, el PLD obliga a su presidente a salir a hacer campaña y todos se apoyan en la fortaleza de Doña Margarita para conquistar una franja –la mas pobre del país- que es la mas sufrida por las políticas del gobierno.
Que se perfila?. Danilo puede sentarse –no lo esta haciendo- a esperar que pasará el 20 de mayo próximo, porque tiene mucha gente –con poder- interesada en que su candidatura salga airosa en la contienda electoral. Primero, la gran masa de empleados públicos que no quieren someterse a los vaivenes de un cambio de gobierno; Segundo, los funcionarios públicos que han manejado recursos del Estado, los que pueden justificar que hicieron con ellos y los que no –sobre todo estos últimos-; Tercero, una parte del empresariado dominicano que aunque Hipólito, a través de Luis Abinader les ha dado muestras y promesas de que las cosas serán manejadas diferentes si le dan “una segunda oportunidad”, no se quieren arriesgar; Cuarto, Doña Margarita no quiere comenzar su carrera como funcionaria electa, perdiendo unas elecciones en las cuales, si bien es cierto ella no es la candidata principal, se vende como tal, y tiene muchos $$$ millones de seguidores apostando a ella; Quinto, Danilo cuenta con el apoyo de un Caballo de Troya, que no lo hizo él, que no lo maneja él, pero que trabaja –en este momento- para su beneficio.
Que se perfila?. En el caso de Mejía, la cosa no está tan clara. Si bien es cierto que todavía parece tener un margen de ventaja –cada día mas corto- sobre su adversario, no menos cierto es que las elecciones no son hoy y tiene un enemigo muy poderoso enfrente. Primero, sus asesores no se quedarán de brazos cruzados ante la nueva propuesta de su oponente. Ya están hablando de Programas de Gobierno, de someter gente a la justicia –arma de dos filos, atrae a votantes pero radicaliza a los opositores- y de no reelección, temas que no habían sido mencionados por el lado blanco porque no había la necesidad; Segundo, la pugna con el Presidente del partido del jacho no es política, es personal y eso, es probable, sea la piedra en el zapato que no lo deje avanzar para mantenerse delante en la carrera; Tercero, Miguel Vargas fue el generador de recursos de las campañas del PRD desde las elecciones de 1982, y ahora no esta produciendo, absolutamente nada, para inyectarle a esa candidatura que se nota regazada ante la apabullante –y creciente- demostración de fuerza del partido en el poder; Cuarto, tratando de congraciarse con Hatuey para dar el tan esperado golpe de efecto, anunciado por lo bajo para enero, de una alianza con el partido del Toro, no se da cuenta de que el Cacique se ha posicionado y ahora que ha aumentado su valor en el mercado, no esta seguro si volver al redil o “botar por el diablo”; Quinto, si el conflicto por un empleado de la Junta se mantiene y la población lo empieza a percibir como señal de “ponerse alante cuando sabe que va a perder”, podría enajenarse una porción de votos que siempre se va con el que cree que va a ganar aun a costa de sus principios, al dominicano no le gusta perder; Sexto, ya no puede contar con la fricción –dejada a un lado por el momento- entre Danilo y Leonel para que este ultimo realizara –como en las elecciones del 2000- acciones desde el gobierno que beneficiaron la candidatura de Mejía.
En fin que lo que queda de campaña será un punta a punta, probablemente decidido por una nariz, la de los partidos aliados –los reales- y los movimientos de apoyo del sector externo –insisto, los reales-. También será trágica, para nuestros oídos que tendremos que soportar la vocinglería –que no suma votos-, provenientes de los Disco Lights, las caravanas entaponando nuestras calles,(como si fuera posible mas), y los pronunciamientos, ofrecimientos y declaraciones mas inauditas, extravagantes y exageradas de bocas de políticos que creíamos serenos y sobrios y de algunos que solo son sobrios serenos que se la dan en políticos.
Hasta luego amigos conscientes.
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